domingo, 25 de febrero de 2018

Lectura Domingo 25 de febrero

Limpiar el polvo y reparar el deterioro

El punto fuerte del chi-kung es prevenir y curar las enfermedades orgánicas o degenerativas. Todos los órganos vitales son constantemente intoxicados por substancias contaminantes y residuos: el colesterol que obstruye el corazón, los nitritos que invaden neuronas, los ácidos que anegan el estómago, el calcio que se forma en los riñones. Pero por naturaleza somos capaces de desintoxicarnos, a condición de que nuestros sistemas de transmisión y reacción funcionen bien.



Pero si hay obturación o bloqueo en nuestros meridianos, por donde circula la energía que lleva la información vital, entonces se ve afectada la eficiencia de nuestro sistema de transmisión y reacción. Por ejemplo, si el conjunto de meridianos que van desde el corazón al sistema nervioso, los meridianos yin, no llevan la información correcta respecto al exceso de colesterol depositado allí, o si el conjunto inverso de meridianos que van del sistema nervioso al corazón, los meridianos yang, no llevan la información correcta respecto a la cantidad de hormonas que hay que producir, entonces pueden producirse enfermedades cardiovasculares. Este mismo principio vale para todos los demás órganos.

La causa de estas enfermedades orgánicas o degenerativas es el bloqueo de la energía, que altera la armonía de los conjuntos de meridianos yin y yang de los respectivos órganos. Una vez que se limpia o despeja el bloqueo y se restablece el equilibrio yin-yang, la enfermedad desaparece naturalmente.

La práctica del chi-kung mantiene en buena forma y funcionamiento a todos los órganos vitales, limpiándolos y reparando los deterioros tan pronto ocurren, eliminando la oportunidad de que se desarrollen y manifiesten en forma de enfermedades orgánicas o degenerativas. Esta es una de las maneras que tiene el chi-kung de mejorar la calidad de la vida y favorecer la longevidad.

Flujo de energía para la estabilidad emocional

El tercer grupo de enfermedades mencionadas antes son las psicosomáticas, a las cuales los chinos, si alguna vez llegan a hacer este tipo de clasificaciones, llaman enfermedades emocionales.

En el capítulo anterior decíamos que lo cinco órganos vitales, corazón, hígado, bazo, pulmones y riñones, están relacionados con las cinco emociones básicas, respectivamente alegría, ira, preocupación, tristeza y miedo. Un bloqueo en la circulación de la energía del hígado, por ejemplo, puede ser excesiva o yang, esta energía, con lo cual la persona es propensa a enfadarse fácilmente; a la inversa, una persona que se enfada con frecuencia va a dañar su sistema hepático.

El meridiano del hígado desemboca en el meridiano del pulmón. Un bloqueo en la circulación de la energía del hígado, por lo tanto, puede provocar una insuficiencia de energía pulmonar. Esta insuficiencia yin en el meridiano del pulmón puede hacer a la persona incapaz de soportar la aflicción.

Fuente: El arte del Chi- Kung, de Wong Kiew Kit

No hay comentarios:

Publicar un comentario