PENSAMIENTO Y ATENCIÓN CENTRAL
1. En la práctica del Yoga, del mismo modo que en toda técnica de interiorización, es de todo punto de vista indispensable que el pensamiento vaya disminuyendo hasta desvanecerse, a voluntad, y que la atención se intensifique y aumente en claridad, profundidad y estabilidad.
2. El pensamiento maneja datos, los compara y los combina; abstrae e infiere. Su acción es inestimable en todos los aspectos existenciales del hombre. Pero no ayuda, salvo en casos excepcionales de neto predominio metafísico, en el trabajo de su interiorización y de su simplificación. La atención correcta, cuando es desarrollada plenamente, es la única facultad que permite la integración y unificación de todos los niveles y planos de la mente humana.
3. El objeto o finalidad de ambos es el conocimiento. El pensamiento utiliza representaciones mentales o ideas de orden general o abstracto. La atención vincula directamente el intelecto con todos los contenidos de conciencia haciéndolos inteligibles, es decir, permitiendo ver dentro de ellos.
4. El pensamiento da vueltas alrededor del objeto pensado. La atención une directamente , en línea recta, el objeto con el sujeto a través de la mente.
5. El hombre está prácticamente hipnotizado por las imágenes mentales, por las ideas que en rápida sucesión están apareciendo en su mente. Está tan acostumbrado a ellas, que llega a creer que sólo ellas son la verdad, y así, es sólo mediante ellas que busca la Verdad: la verdad de sí mismo, de la Naturaleza y de Dios.
6. Debido a la experiencia de que el conocimiento de las cosas concretas, obtenido mediante la mente, le permite manejarlas y modificarlas más o menos satisfactoriamente, ha llegado a la convicción de que toda verdad depende de acertar con la idea adecuada, la que corresponde a la cosa. Esto es correcto en lo que se refiere a las cosas, al mundo objetivo externo; también lo es respecto a los contenidos naturales de sí mismo. Pero no lo es respecto a este sí mismo.
Extracto del libro Fundamento y técnica del Hatha-Yoga , de Antonio Blay Fontcuberta
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